Al llegar las últimas horas de un joven enfermo, se pedía a todos los miembros de la Congregación de Jóvenes vivirlas solidariamente. Las campanas de la parroquia tañían en señal de que alguien agonizaba..
Art. 48. Cuando se vea venir la agonía, todos los Congregantes que no estén impedidos, irán en seguida a la iglesia, con el corazón afligido de dolor, para asistir a las oraciones que el Sr. Director hará él mismo.
Quienes cuidaban del moribundo, se unirían a quienes se encontraban en la iglesia.
Art. 49. Mientras los congregantes, por una parte, asisten en la iglesia a las oraciones de los agonizantes, los enfermeros, por otra parte, quedarán al lado del enfermo para recitar las mismas oraciones.
Statuts XIV, §2 Envers les congréganistes malades
El gesto de estar unidos con los hermanos ausentes es una de las características de la oración de Eugenio – en particular durante los momentos de “oraison”. (Ver los textos del 4 y 5 de agosto, 2011.)
¿Puedo ver el pesar de otro
Y no sufrir también?
¿Puedo ver el dolor de otro,
Y no buscar un bondadoso alivio?
William Blake