De peregrinaje en Loreto, vemos en práctica el otro estilo de oración central de Eugenio. A lo largo de su vida, siempre trató de estar consciente de la presencia de Dios en su corazón en todo lo que hacía – así como también llevaba en el corazón a todos sus seres queridos: su familia Oblata y su familia de sangre.
Esta mañana tuve la dicha de ofrecer el santo sacrificio en la venerada casa donde estuvo el Hijo de Dios…lo ofrecí por la familia, extendiendo mi intención a los que son dignos de formar parte de ella …
Un momento importante para Eugenio cada tarde es lo que conocemos como oraison, momento de comunión con todos los que estaban cercanos a él, en la presencia Eucarística de Jesús. (cf. http://www.eugenedemazenod.net/esp/?p=795 y otras entradas en el portal, al entrar y buscar “oraison”)
Todos nuestros amigos no se extrañarán de que me haya ocupado de ellos en la capilla ayer, rezando una breve oración por cada uno de ellos en particular. No salí hasta que el cansancio me obligó.
La piedad de los fieles que vienen a la capilla y no salen de allí sin haber besado varias veces los muros con una efusión de afecto muy conmovedora, inspira ternura y lleva a uno a compartir sus sentimientos
Carta a Henri Tempier, Mayo 7, 1826, EO VII núm. 239
“La poesía es Eucarística para mí. Tomas en tu cuerpo el sufrimiento de alguien, su pasión llega a tu cuerpo y al hacerlo, conversas, tomas comunión y formas una comunidad con los demás.” Mary Karr