DERRIBAS TODAS LAS PUERTAS Y TOMAS TODOS LOS LUGARES

Solo unos meses después de su viaje arrollador a algunos de los seminarios diocesanos, el Padre Leonard ya estaba convenciendo a varios jóvenes de unirse a la vida religiosa y las misiones Oblatas. Eugenio escribe entusiasmado:

“Pero, querido Padre Leonard, ¿qué clase de hombre eres tú? Derribas todas las puertas y tomas todos los lugares. Nada se te resiste y si algún Obispo quiere salvar su mundo tiene que prohibirte hablar,  como creyó debía hacerlo el buen Arzobispo de Chambery. En revancha, el Obispo de Annecy ha hecho lo doble… Los mismos misioneros te presentan a los jóvenes ¡es increíble!”.

El reto ahora era encontrar un lugar para albergar a todos para su formación y estudios.

“Mientras tanto, hay que hacer lugar en l’Osier, esperando la llegada de todos esos jóvenes de buena voluntad que se han anunciado… Ves que tengo razón al querer que no olvides ninguna diócesis”.

Carta al P. Leonard Baveux, durante su campaña de reclutamiento. Abril 2, 1847, EO X núm. 925

REFLEXIÒN

«Nunca se ha logrado nada importante sin entusiasmo».

Ralph Waldo Emerson