Estamos fundados expresamente para convertir las almas, y Dios nos ha dado a conocer, a lo largo de los años, que nosotros proclamamos su misericordia a los pecadores, si se realizan milagros a través de nuestro ministerio. Este es el sello de su aprobación.
Notas de retiro, octubre 1826, E.O. XV n. 157.
La predicación de misiones era la razón principal de la existencia de los oblatos. De ahí que ellos se dieran generosamente a este ministerio, convencidos de que eran los cooperadores del Salvador mismo y sus instrumentos o corredentores. El hecho de que durante la vida de Eugenio el número de misiones solo en Francia rondara las 3000 atestigua la convicción de los oblatos sobre la utilidad de las misiones y el valor que tenía el dedicar la vida a ellas.